Caricias que sentir en la distancia, abismo insalvable, ojos en un mar de olas lejanas, viento promesa de un amor sin fin. Mis lágrimas caen al vacío porque este amor no tiene olvido, cada lágrima, cada gotita de agua salada que resbala por mi cara es un océano de pasión que se pierde en negro.
Juré no volver a caer, vi mi alma reflejada en un cielo de hielo y azul llena de tristeza y amor y juré no volver a caer. Sin embargo cómo negar a este corazón la sangre que le alimenta, cómo prohibir a este hombre amar.
Si melancolía es recordar el olor de tu cuerpo, si melancolía es sentir aún el dulce tacto de tu piel en mi piel, lo confieso, tengo melancolía de ti. Si cada vez que pienso en tus ojos mi alma se encoje y me siento como un caminante sin patria ni puerto al que arribar, lo confieso, tengo melancolía de ti.
Melancolía de tu sonrisa, de tu voz susurrando en mi oído palabras de poeta, del tiempo que se fue volando y del amor del que me fui volando. Yo era un niño que cometa al viento descubrió el sol que más brillaba, el pirata que buscaba un tesoro y encontró un sentimiento. Qué alguien me diga cómo poder olvidar de mi mente ese amor que aún siento.
Te quiero tanto, te quise tanto, te quiero tanto, tanto, amor, que veo mi alma naufragando en una isla desierta, tanto te quiero, tanto, tanto, que mis gritos callados se pierden en un temporal de heridas abiertas. Ahora que mi boca es sinónimo de soledad, de besos que no llegan a ninguna parte, al viento alzo mi voz suplicando olvido pero recordando el sabor de tus labios.
Si alguien alguna vez ha amado, si alguien ama todavía, dadme un pañuelo para secar las lágrimas y decidme como se apaga el fuego de mi alma, este fuego que me consume a cada minuto que paso lejos de los ojos que quiero. Luna cuarto menguante.
Cómo decir con palabras todo lo que siento, cómo poner sobre este papel en blanco el dolor que me recorre, cómo dibujar el latir de un corazón que ve su sentir tan lejos pero que ansia tenerlo muy cerca.
Si mi niña bonita, si mi dolor lejano, si mi pasión desenfrenada, lo confieso, lo confieso gritando al viento en esta noche del mes de Abril, tengo melancolía de ti, cómo no tenerla…estando tan lejos de ti.
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